miércoles, 19 de septiembre de 2007

Alicia y los locos...


El Gato, cuando vio a Alicia, se limitó a sonreír. Parecía tener buen carácter, pero también tenía unas uñas muy largas Y muchísimos dientes, de modo que sería mejor tratarlo con respeto.

-Minino de Cheshire -empezó Alicia tímidamente, pues no estaba del todo segura de si le gustaría este tratamiento: pero el Gato no hizo más que ensanchar su sonrisa, por lo que Alicia decidió que sí le gustaba-.Minino de Cheshire, ¿podrías decirme, por favor, qué camino debo seguir para salir de aquí?
-Esto depende en gran parte del sitio al que quieras llegar -dijo el
Gato.
-No me importa mucho el sitio... -dijo Alicia.
-Entonces tampoco importa mucho el camino que tomes -dijo el Gato.
-... siempre que llegue a alguna parte -añadió Alicia como explicación.
-¡Oh, siempre llegarás a alguna parte -aseguró el Gato-, si caminas lo suficiente!

A Alicia le pareció que esto no tenía vuelta de hoja, y decidió hacer otra pregunta:
¿Qué clase de gente vive por aquí?

-En esta dirección -dijo el Gato, haciendo un gesto con la pata derecha- vive un Sombrerero. Y en esta dirección -e hizo un gesto con la otra pata- vive una Liebre de Marzo. Visita al que quieras: los dos están locos.
-Pero es que a mí no me gusta tratar a gente loca -protestó Alicia.
-Oh, eso no lo puedes evitar -repuso el Gato-. Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca.
-¿Cómo sabes que yo estoy loca? -preguntó Alicia.
-Tienes que estarlo afirmó el Gato-, o no habrías venido aquí.
Alicia pensó que esto no demostraba nada. Sin embargo, continuó con sus preguntas:
-¿Y cómo sabes que tú estás loco?
-Para empezar -repuso el Gato-, los perros no están locos. ¿De acuerdo?
-Supongo que sí -concedió Alicia.
-Muy bien. Pues en tal caso -siguió su razonamiento el Gato-, ya sabes que los perros gruñen cuando están enfadados, y mueven la cola cuando están contentos. Pues bien, yo gruño cuando estoy contento, y muevo la cola cuando estoy enfadado. Por lo tanto, estoy loco.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Locura compartida... a veces las palabras están de más... no hay nada que pueda decir acerca de este fragmento que vos ya no sepas...

Anónimo dijo...

"Cultive la locura, nunca la detenga, no tenga lí­mites. ¿no le parece? Es como decir: salte, brinque, ame su inquietud. El arte es esa papa caliente que a uno le pusieron en la mano, es el resplandor que hiere los ojos, el espejo en el que nos vemos menos responsables, menos contenidos, más desatados. Van Gogh comprende?"

"Cultivar el arte es adorar la locura, quitar frenos, desanudar la represión, sacarse las máscaras y escupirle en la cara a la gente pero no para agredirla sino para amarla, conmoverla y ayudarla a que Sienta."

"Hace falta, para eso, que todo hierva en la cabeza, que la taquicardia se adueñe del corazón, que los jugos gástricos sean como un cataclismo: fuego puro, flama, incendio, y que no haya conclusiones ni mensajes, ni moralejas ni predicas; solo arte, es decir Emoción, escupitajo, brinco, belleza y soliloquio."

Anónimo dijo...

recordar: del latín recordis, volver a pasar por el corazón.